| (Revista MINERÍA CHILENA)Mayor apoyo hacia la minería mediana, pequeña y artesanal demandan diversos actores de la Región de Atacama. Admiten que ha habido avances para facilitar la producción de minerales, pero quedan aspectos pendientes como acercar aún más la minería a la comunidad y potenciar las políticas de fomento.
Un equipo de MINERÍA CHILENA viajó hasta la zona para conversar con autoridades, empresarios y dirigentes gremiales respecto de las facilidades y obstáculos que enfrenta el rubro para desempeñarse especialmente ante el auge inversional que vive la región.
"Si hay una región que destaca por el tamaño de su mediana y pequeña minería esa es Atacama", asevera a MINERÍA CHILENA el secretario regional ministerial de Minería, Mauricio Pino.
Hasta la Mina San Francisco, ubicada en la Sierra Jesús María a 12 km de Copiapó, viajó MINERÍA CHILENA junto con el seremi, quien debía revisar los avances del nuevo campamento que se construyó en esa pequeña faena con aporte público.
La autoridad señala que "en esta región la pequeña minería produce el 60% del cobre que explota el sector a nivel nacional. Además -junto con la minería artesanal local- explota el 45% del oro que se produce dentro del país aparte de la Gran Minería. Tenemos más de 300 pequeñas faenas mineras, y 27 asociaciones mineras y sindicatos".
Aporte público
Mauricio Pino asegura que la asistencia al sector ha mejorado en la región. "Hemos aportado equipamiento, más regularizaciones y han mejorado las condiciones de seguridad. Estamos nivelando y para arriba", sostiene.
Entre los aportes, la autoridad destaca un programa que reemplaza las llamadas "ranchas" de los campamentos por habitaciones tipo container forradas con aislante para calor y frío, y que cuentan con baño y otras instalaciones. "Hemos facilitado equipamiento a las asociaciones y sindicatos, los que se organizan para darle un uso equitativo y adecuado. También brindamos camionetas de traslado de explosivos", destaca.
Pino indica que tras el accidente de la mina San José, la seremi se puso en campaña para que todas las minas de los pequeños y artesanales estuvieran legalizadas. "Además, financiamos la 'segunda salida' o alternativa para escapar ante una eventualidad dentro de la mina", resalta.
Ignacio Nasal, secretario del Sindicato de Pirquineros de Copiapó, afirma a MINERÍA CHILENA que otro proyecto que se diseñó junto con el Gobierno para mejorar las condiciones de trabajo de la pequeña minería es el que permite dotar a las faenas de antenas transmisoras con radio y con ello mejorar la comunicación.
En tanto, en su oficina de Copiapó, MINERÍA CHILENA conversó con el gerente de Fomento de la Empresa Nacional de Minería (Enami), Jorge Guerra, quien aseveró que "en Atacama hay siete medianas mineras que producen sobre 10.000 ton y su situación es favorable dados los precios que hemos tenido y porque se manejan con eficiencia. Hoy estamos licitando tres proyectos mineros interesantes destinados a mediana o gran minería. Pero el problema de este subsector es que la gran minería con sus proyectos le levanta la gente".
Guerra reconoce que la mediana minería tiene razón al compararse con la clase media alejada de beneficios. "Es la más controlada. Y para los pequeños el problema es que las grandes mineras tienen muchos territorios ocupados", resalta.
El ejecutivo sostiene que además de otorgar créditos se sigue orientando al productor en la determinación de leyes, trámites para operar, requisitos de seguridad, entre otros. Además, se brinda capacitación competitiva en perforación, tronadura, contabilidad básica, asociatividad y uso de GPS.
Por su parte, el director regional de Sernageomin, Jaime Herrera, asevera a MINERÍA CHILENA que "queremos transformar los pilares estratégicos este 2012 en obras de arte, muy de la mano con mayores fiscalizaciones, regularización de proyectos de explotación y más formación de monitores de seguridad y expertos formados al alero del servicio".
Precisa que en 2011 la meta en número de fiscalizaciones fue de 1.010 y se realizaron 1.036 y que este año se espera llegar a 1.950. En tanto, en regularización de proyectos el desafío es alcanzar 500 este año.
Mayor consideración
Según el subgerente general de la mediana minera S.C.M Atacama Kozan, Francisco Sánchez, aún la Región de Atacama no asume el rol de región minera que le compete. "Muchas veces nosotros nos sentimos como 'los malos' de la película o percibimos que la gente cree que las empresas poco aportan", precisa.
"A pesar de que las compañías siempre están preocupadas por la seguridad y el control medioambiental, la gente sigue cargándonos con prejuicios de épocas pasadas", asevera el ejecutivo.
Estima que debiera haber una actitud más positiva tanto de las autoridades como de la comunidad. "Por ejemplo, pedimos que cuando se hagan los planos reguladores se considere dónde estamos nosotros. Hay instalaciones mineras que hoy aparecen físicamente muy cercanas a la ciudad, pero que antes estaban lejos. Las ciudades crecieron hacia los sectores mineros industriales, pero 'los culpables' somos las mineros".
¿Cambio de actitud? Es lo que esperaría Sánchez. "Esto junto con un mayor acercamiento hacia las mineras. Existen algunas iniciativas, pero veo con preocupación que la comunidad no entienda que el desarrollo de Atacama tiene que partir necesariamente por un mayor apoyo a la minería como palanca de desarrollo", asevera.
El ejecutivo precisa que Atacama Kozan, que procesó alrededor de 1.500.000 toneladas de mineral en 2011, constituye una fuente de trabajo para 350 personas de manera directa y para otras 400 de forma indirecta. "El 95% son habitantes de Copiapó y Tierra Amarilla", destaca.
Políticas de fomento
"La pequeña minería está creciendo en Atacama, pero más por el alto precio de los metales que por gestión y políticas de fomento", señala a MINERÍA CHILENA el presidente de la Asociación Minera de Copiapó, Eduardo Catalano, administrador de las mineras Andrea y Alejandra.
El dirigente sostiene que aún las políticas no se acercan a la descentralización. "A la propia Enami la sentimos muy centralizada. Decisiones pequeñas se toman en Santiago. El directorio en Enami no está a la altura para generar políticas que nos satisfagan. Necesitamos una mayor comprensión del medio donde se desarrolla el pequeño minero", asegura.
"Lo que proponemos es modernizar a Enami, fortalecerla. Queremos velocidad de respuesta a los problemas; una respuesta tecnológica cuando corresponda; fomento en términos de créditos rápidos y oportunos. Pero fundamentalmente soluciones claras", indica.
"Nos hace falta avanzar en temas emblemáticos como el concepto del 'panteón'. Por otra parte, hay geólogos para la pequeña minería, pero nos faltan metalurgistas con experiencia", afirma Catalano.
También estima que se necesita más capacitación y valor agregado para la materia prima. "Estamos dispuestos a recibir más créditos para destinarlos especialmente a tecnología. Faltan fundiciones administradas por nosotros", advierte.
"Queremos que el Estado sea más activo para facilitar nuestra acción como empresariado. Tenemos grandes desafíos que enfrentar y pedimos ayuda a gritos", agrega Catalano.
MINERÍA CHILENA se reunió además con Mario Morales, presidente de la Asociación Minera de Tierra Amarilla y propietario de Mina Patagonia, quien admite que han tenido de parte de la seremi de Minería mayor apoyo en infraestructura.
"En nuestra asociación contamos con un compresor y máquinas, que se nos facilitaron y que administramos para su mantención. Se nos ha ayudado en la iniciación de actividades y término de faena. Pero aún existe lentitud en la autorización para uso de polvorines y explosivos", agrega.
¿Oportunidades? Morales afirma que la gran minería las podría brindar. "Mi llamado es a que los grandes mineros nos arrienden aquellas vetas que ellos no van a explotar. Es decir, que haya más acercamiento, porque ahora no hay relación", asevera.
Ley de Seguridad
Respecto del proyecto de Ley de Seguridad e Institucionalidad Minera, Mauricio Pino admite que a nadie le gusta que le cambien las reglas del juego. "Pero, mediante las nuevas normas queremos establecer algo muy simple: el irresponsable en seguridad tiene que pagar".
Eduardo Catalano sostiene que en su asociación hay mucha preocupación por las futuras exigencias en seguridad. "Necesitamos una normativa de seguridad que sea diferente a la de la minería mediana y grande", asevera.
"La nueva legislación podría ponerle la lápida a mi mina", precisa Mario Morales. "Yo creo que no hay política minera para la pequeña minería. Nos meten en el mismo saco con todo el resto de la minería", añade.
Ignacio Nasal, secretario del Sindicato de Pirquineros de Copiapó, sostiene que "un pequeño minero no puede pagar $38 o $40 millones de sanción, en circunstancias que en promedio su mina obtiene $5 millones mensuales. Que se multe a base de la producción del minero", reclama.
"Estamos conscientes de lo que platean los pequeños productores respecto de las exigencias. Estamos buscando una solución para que las multas sean acordes a los ingresos de la mina", responde Mauricio Pino.
Fuente /Revista MINERIA CHILENA |
Mineros de Atacama piden mayor atención 
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